Un pedazo de cielo en la tierra: la iglesia de la Vera Cruz
En realidad, podría ser parte, comparativamente hablando y por odioso que esto resulte a veces, del entretenimiento visual con el que antiguamente nos gratificaban en los cines, poniendo esos anuncios interminables entre película y película, en aquéllos tiempos felices en los que ponían dos por el precio de una. Con la salvedad, de que a diferencia de éstos, la iglesia segoviana de la Vera Cruz es algo más que un simple ínterin para amenizar una espera. Es una auténtica porción de Cielo plantada en solitario, a las afueras de la ciudad, como un baluarte a la Belleza y la Perfección. Siempre ha sido uno de mis lugares favoritos, y recuerdo que este verano, mientras preparaba los pormenores de mi viaje a Galicia, sentí unos deseos irreprimibles de acercarme hasta allí y gozar en solitario de tan inconmensurable Obra de Arte. No me voy a extender más de la cuenta, porque tampoco tendría demasiado sentido, volver a considerar lo que tantas veces se ha dicho. Simplemente me dejo llevar por el sentimiento y mientras preparo algunos de los lugares, reconocida o supuestamente de origen templario de esa brumosa y mágica tierra celta, os animo a dejaros llevar por la ilusión de las imágenes. Si, como dicen, una imagen vale más que mil palabras, éstas se multiplican por diez cuando de la Vera Cruz se trata.
Comentarios
Un beso.
Enigmática sin duda, y ahora que has contado ese pequeño secreto del castillo de Pélerin (Peregrin?), aún más.
Bsines